Podemos, el partido de moda en España, vivió sus pininos revolucionarios en América del Sur. Sus líderes trabajaron como asesores para los Gobiernos ‘bolivarianos’ y ‘progresistas’ en Venezuela, Bolivia y Ecuador a nombre del Centro de Estudios Políticos y Sociales, CEPS. Precisamente los creadores del CEPS, los juristas Roberto Viciano y Rubén Martínez Dalmau, trajeron sus ideas sobre un nuevo constitucionalismo popular, cuando participaron en la elaboración de las Constituciones de esos tres países. Y ahora una de las consignas de Podemos es hacer una Asamblea Constituyente. Esta es la historia de cómo un experimento en Los Andes tal vez prefigure el futuro de España.