La alumna más aventajada de Hugo Chávez cae en desgracia

Descrita por sus enemigos como una versión de Doña Bárbara, el personaje de la novela de Rómulo Gallegos, la alcaldesa Zobeida El Hinnaoui destaca más bien por su empeño en reproducir en Calabozo, la calurosa ciudad de los llanos de Venezuela, los modos que impuso el fallecido presidente Hugo Chávez y sus relaciones tormentosas con todas las fuerzas vivas de la ciudad que le adversan. Pero el asesinato de un exdiputado chavista, en el que han incriminado a su hermano, parece haberle volteado el santo del gobierno y amenaza con terminar su carrera política.
En
las blancas paredes de la población llanera de Villa de Todos Los Santos, en
Calabozo, Venezuela, destacan enormes pintadas en letras rojas, como el color de
la autodenominada revolución bolivariana, que rezan "Zobeida Asesina". Un
trabajador de la alcaldía del municipio Francisco de Miranda, ubicado en el
centro del estado Guárico, se afana en la dura labor de tapar con pintura blanca
la acusación del grafiti.
La
incriminada es la alcaldesa Zobeida El Hinnaoui, un personaje que sus
detractores acusan de intentar interpretar la épica del hombre civilizado contra
la naturaleza llanera con terribles resultados. Aunque su iconografía política
intenta equipararla a Eva Perón, y en sus redes proclama querer parecerse a la
Princesa Diana, sus enemigos, y los residentes del pueblo que gobierna, la ven
como una Doña Bárbara maléfica que cayó como paracaidista en una realidad que no
conoce, que no ama y cuyo pulso es incapaz de seguir.
Ella
es de tez blanca, abogada de profesión, oriunda del estado Aragua y de 27 años.
Presume de una cabellera muy bien cuidada, que se precia de pintar de diversos
colores, que enmarca un rostro donde destacan grandes ojos negros. Madre de una
niña que aún no camina, solía mostrarse en estado en gran cantidad de actos
públicos. Hasta hace muy poco usó ortodoncia. Su fenotipo contrasta abruptamente
con la zona rural en la que se encuentra, dejando claramente al descubierto su
origen árabe.
El
Hinnaoui se enfrenta hoy al escándalo de que su hermano Omar, quien fungía como
director general de la misma alcaldía, fue detenido junto a cuatro funcionarios
de la policía municipal, a quienes acusan de asesinar a Ramón Enrique Barreto
Andrade, un exdiputado del Consejo Legislativo del Estado Guárico por el Partido
Socialista Unido de Venezuela, y a su esposa Digni Díaz de Barreto, el pasado 25
de junio en la urbanización Los Palomares de esa población. El tribunal ha
aprobado la medida privativa de libertad solicitada por la fiscalía para el
hermano de la alcaldesa, los policías municipales Randy Almeida y Gabriel
Álvarez, así como el escolta Eduard Peña. También fue imputado el secretario de
Seguridad Ciudadana de Calabozo, Dayron Yépez.
En
la audiencia de presentación, los fiscales 41º nacional y 2ª de esa
jurisdicción, Alejandro Peña y Mariana Franco, imputaron a Almeida por el delito
de sicariato, mientras que a El Hinnaoui le precalificaron el mismo delito, pero
en grado de determinador. Yépez y Álvarez fueron imputados por ser presuntos
cómplices necesarios en sicariato. Además, a Peña le precalificaron homicidio
calificado con motivos fútiles e innobles.
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Por control del Clap
Los
enemigos de Omar El Hinnaoui afirman que como tenía aspiraciones electorales en
Guanarito, en el estado Portuguesa, tomó el control del programa Clap (Comité
Local de Abastecimiento y Producción), mediante el cual el gobierno distribuye
alimentos de primera necesidad en bolsas. De esa forma, siempre según esas
versiones, estaría desviando la comida correspondiente a Calabozo hacia Guanare
para ir cultivando favores preelectorales. Otra versión apunta a que estaba
comercializando los productos del Clap para beneficio
propio.
Omar
El Hinnaoui Salah es nativo del estado Aragua, en la zona centro costera de
Venezuela, tiene 26 años y se mudó a Calabozo luego de que el Partido Socialista
Unido de Venezuela designara como candidata a la alcaldía del municipio
Francisco de Miranda a su hermana. Era miembro del Estado Mayor de Alimentación,
y, en un claro ejercicio de nepotismo, su hermana lo había nombrado director
general de la alcaldía.
Ramón
Barreto era representante del programa Barrio Nuevo y encargado en la
gobernación guariqueña del Estado Mayor de Alimentación. Barreto habría notado
el trasiego de alimentos e insumos y realizaría una investigación profunda que
involucraba al hermano de la alcaldesa. Por esa razón había sido amenazado de
muerte.
Las
pruebas quedaron a salvo con la muerte de Barreto. Las presiones políticas
impidieron que el caso quedara olvidado como tantos otros y marcaran con un
fierro el futuro de los hermanos El Hinnaoui. Fue el propio gobernador chavista
del estado, el exinfante de la Marina venezolana Ramón Rodríguez Chacín, la
persona que anunció que Omar El Hinnaoui era el supuesto autor intelectual del
crimen de Barreto.
Pero
ese impulso inicial parece estarse diluyendo en las últimas semanas. Fuentes de
la alcaldía refieren que las pruebas obtenidas en el allanamiento han
desaparecido y auguran que resultará difícil aplicar la justicia por la gran
cantidad de intereses políticos y económicos que allí se
manejan.
No
fue posible contactar a la alcaldesa, su equipo de prensa quedó en dar una
respuesta para este trabajo. De cualquier modo, en Calabozo ya se había referido
al caso como una afrenta del gobernador de Guárico, Ramón Rodríguez Chacín, para
quien en campaña solo tenía buenas palabras y del que ahora lamenta que la haya
atacado 30 días después de haber dado a luz su única hija: “Pido el máximo de
respeto a Rodríguez Chacín, luego de ver sus declaraciones me siento violentada
en mi privacidad, en mis derechos humanos y en los de mi madre y mi familia. Es
una situación que le puede pasar a toda persona”.
La
alcaldesa se ha presentado como una víctima. En las distintas cuentas en redes
sociales ha publicado videos en las que se declara víctima de una persecución,
pero también amenaza a sus enemigos políticos y amenaza a sus supuestos
verdugos. En la televisión ensaya un gesto de dolor y una rabia apenas contenida
por las circunstancias que la han obligado a hablar del caso de su hermano, su
jefe de guardaespaldas y tres integrantes de su policía
municipal.
–Rodríguez
Chacín se comporta como se comportó Carmona Estanga en su momento. Yo soy un
Hugo Chávez Frías, yo sí soy hija de Chávez.
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Saqueos y atentados
La
alcaldesa Zobeida El Hinnaoui va de escándalo en escándalo. Ha tenido el triste
honor de ser trending topic en Twitter por un video aficionado
capturado el 11 de abril de 2016. Ese día llamó a saquear los comercios de
Calabozo que se negaran a vender alimentos. “Es a juro, sí o sí. O nos venden o
los saquean”, arengaba. Una de las premisas de su silogismo es que ningún
comercio privado es chavista. Sus dueños, “escuálidos y burgueses”, merecen ser
saqueados. Ese video fue capturado en un galpón expropiado por su despacho “en
nombre de la revolución y para beneficio de la comunidad”. Tantos estupores
provocaron sus palabras que hasta el portal progubernamental La Iguana censuró
su postura.
Fue
la cumbre de una sistemática política de acosos, que ofreció sus indicios más
fascistas el 4 de febrero de 2016. Cuando los comerciantes de la ciudad
decidieron cerrar por 24 horas en protesta por las expropiaciones y las amenazas
de saqueo, la alcaldesa ordenó que la puerta de todo local plegado a la protesta
fuese marcada con una equis roja. Era una contraseña con la que pretendía
informar que ese local podría ser expropiado o saqueado. El Hinnaoui se felicitó
por ese gesto en sus redes sociales. Cuando el diputado Ismael García informó
sobre este hecho en su cuenta de Twitter, El Hinnaoui expresó: “Si una basura y
porquería como @ismaelprogreso me insulta algo bueno estoy haciendo! Traidor
apátrida”.
En
dos ocasiones la alcaldesa Zobeida El Hinnaoui, ha denunciado ante medios
locales ser víctima de atentados. El 25 de diciembre de 2015 motorizados
desconocidos dispararon contra la camioneta blindada en la que se trasladaba por
la ciudad.
La
periodista Zulay Carrillo, del diario local La Antena, redactó una
nota de prensa donde cuenta los hechos. La alcaldesa compartía con los
directores de las distintas oficinas del órgano municipal en el aeropuerto de
Calabozo cuando dieron las 10:00 de la noche. A esa hora decidió retirarse con
su tío, una amiga cercana y dos escoltas a bordo de una camioneta Toyota
Fortuner de color blanco. Tomaron la avenida Francisco de Miranda, pero a poco
de andar dos motos se atravesaron en el trayecto del vehículo. Uno de los
parrilleros disparó hacia la puerta trasera del lado del copiloto en donde
estaba sentada la alcaldesa. Las balas no pudieron atravesar la carrocería
blindada.
En
enero de 2014 El Hinnaoui aseguró que había sido víctima de una emboscada cuando
iba en comitiva oficial por la carretera Nacional de Calabozo rumbo a San Juan
de los Morros. El relato del diario La Antena asegura: “A la
altura de la hacienda Las Maravillas se le atravesó una camioneta blanca, marca
Toyota-Hilux, sin placas, mientras otro vehículo Toyota “machito”, con varios
sujetos a bordo y desenfundando armas, pretendieron secuestrarla; sin embargo,
el ataque fue repelido de inmediato por el equipo de seguridad y los individuos
se dieron a la fuga”. Se sintió entonces acosada y anunció que reduciría sus
desplazamientos, mas no su correosa voluntad de “seguir impulsando el
socialismo”, como declaró al diario.

Comercios marcados por la alcaldia // Fotografía: eltubazodigital.com
La ordenanza de la discordia
Estos
no han sido días fáciles para El Hinnaoui. Aun así, en las calles de Calabozo
hay quien le reconoce su aura: José Rafael Delgado, señala que fue la alcaldesa
la que mejoró el transporte por medio del llamado Bus Calabozo y organizó, al
mismo tiempo, el comercio informal, tras confinar a los buhoneros en un terreno
baldío ubicado al final de la carrera 12.
“Ha
estado muy abocada a la parte social y a los sectores desprotegidos, hace con
frecuencia jornadas, entregas de útiles, pero no tiene compromiso con la región
y con su idiosincrasia”, relata.
El
escándalo que involucra a su hermano en el asesinato del ex diputado del consejo
legislativo ha arruinado a la alcaldesa hasta sus planes de reelección. Ya no se
trata solo de esa muchacha desbocada que se enfrentó a los comerciantes y les
subió los impuestos a través de la polémica Ordenanza Sobre Actividades
Económicas de Industria, Comercio, Servicios o de Índole Similar, que fue
aprobada el 30 de diciembre de 2015 por solo cinco de los nueve concejales
chavistas, uno de ellos un suplente.
Santa
Elena Pérez, contadora de profesión, y partícipe de la comisión técnica de la
Cámara de Comercio en la lucha contra los impuestos municipales, indicó que lo
más perjudicial de esa ordenanza era el aumento abrupto de las alícuotas, en
torno a 1.700 por ciento. Destacó que muchos comercios cerraron debido al
aumento. Por ejemplo, una conocida librería del lugar que por patente debía
pagar 7 mil bolívares terminó contribuyendo con 78 mil. “En ninguna ordenanza
municipal en el resto del país, existen dos alícuotas, una mínima y otra máxima,
eso es violatorio de toda la legislación tributaria. Lo peor es que aquí solo
aplicaban la más fuerte”.
El
dueño de una tienda de celulares, quien pidió reservar su nombre, indicó que su
ganancia era de 12 por ciento y debía cancelar en tributos municipales 6 por
ciento, cuando anteriormente solo pagaba 0,5 por ciento. De allí deriva una de
las preguntas que se hacen los calaboceños; ¿dónde están reflejados esos
impuestos ya cobrados? El colapso de la infraestructura citadina es palpable en
todos los ámbitos.
Calabozo
es un pueblo donde unos pocos luchan por los intereses de muchos. Tal lema lo
confirma José Luis Guirado, presidente del gremio comercial de la ciudad, y
quien destaca que uno de los problemas principales es que la alcaldesa siempre
los ha visto como enemigos. Destacó que el 27 de enero los comerciantes
decidieron hacer protestas frente al concejo municipal para pedir una ordenanza
nueva, la presión sirvió para que se nombrara una comisión técnica. Considera
que el gravamen municipal superaba con creces a los impuestos regional y
nacional.
En
una segunda protesta pidieron hablar con la alcaldesa, pero ella no se presentó
al sitio de la concentración. Los llamó cobardes y asquerosos en una de sus
ya célebres
intervenciones públicas que
sus opositores han grabado y viralizado: “Tienen hasta el 15 de febrero para que
paguen, ellos verán”. Y agregó: “La única manera de que pisen un barrio y se
acerquen al pueblo marginal chavista es que se les toque el bolsillo, pues les
voy a tocar el bolsillo, no uno sino los dos, nosotros no somos locos, nosotros
estamos preparados, nosotros hemos estudiado”.
Guirado
dice que buscó asesoría para enfrentar los efectos de la ordenanza y optaron por
la vía judicial ante el nulo intento de diálogo. Con el apoyo del bufete
Palacios Torres y Kordoy introdujo un amparo ante el Juzgado Quinto Contencioso
Tributario. El pasado jueves 7 de julio el tribunal falló a favor de la cámara
de comercio.
Ha
sido una derrota momentánea para la alcaldesa que hoy luce con un poder
menguado. El miércoles 6 de julio los comerciantes se reunieron con el nuevo
responsable de los Clap en la ciudad, Francisco Graterol, con el alcalde de
Camaguán, José Vásquez, y otros funcionarios. Allí los comerciantes acordaron
reunirse con concejales para derogar la ordenanza. Guirado, a cambio se
comprometió a prestar el mayor apoyo posible en los
Clap.
Su Némesis
La
alcaldesa lo ha calificado en alocuciones públicas de “mamita, chismosita,
loquita, brutica”. Le ha dicho que sacó de una caja de cereal su título
universitario. El 11 de abril le dedicó los epítetos propios del chavismo más
descalificador: “cachorro del imperio, arrastrado, pitiyanqui, niñito de papi y
mami”. Lo bautizó públicamente como el concejal de la cobardía, y afirmó que a
ella le sobran ovarios “ante la falta de cojones” del concejal. Se llama Orlando
Rodríguez y es el único representante de la oposición, específicamente por
Primero Justicia, en el municipio Miranda.
El
11 de marzo de 2016 Rodríguez fue atacado por tres desconocidos que se
identificaron como Tupamaros. Lo golpearon, lo lesionaron con un arma blanca y
le sacaron una pistola para disuadirlo de su posición frontal contra la
alcaldesa. Luego, el 26 de marzo 2016, fue suspendido de funciones edilicias por
un mes. Y ya para el 31 marzo lo detuvieron junto a tres jóvenes activistas
durante dos días en la celda de castigo de la policía municipal, por estar
recogiendo firmas para el revocatorio.
Rodríguez
piensa que la alcaldesa no quiere a su pueblo y que vive incomunicada, rodeada
de guardaespaldas. “Después de las elecciones municipales del 8 de diciembre de
2013 se conoció que la cámara municipal estaría compuesta por ocho concejales
del PSUV y solo uno por la oposición. Ellos hicieron un show para la toma de
posesión, pero nunca se esperaron que yo me presentara. Para ellos ha sido una
sorpresa que no me haya cuadrado con el Gobierno. Yo me he enfrentado con
ella”.
La
describe como una mujer que irradia maldad y que da la impresión de ser
mentirosa, como muchas de las fuentes consultadas para este trabajo. “Cuando
comenzó la legislatura empezaron a multar a todo el mundo a partir de cálculos
sobreestimados. La multa más tonta era de 30 o 40 mil bolívares y con
eso raquetearon a todos los comerciantes del municipio”,
recuerda el edil Rodríguez. “En el segundo año pusieron a todo el mundo a pagar
la patente y no entregaron el cartón porque no había materiales y luego los
fiscales de la Alcaldía cerraron los comercios porque no tenían el cartón y de
paso los multaron”, agrega.
Para
Rodríguez, una de las grandes denuncias pendientes es la existencia de una gran
mafia de la comida. Se eliminaron a los bachaqueros, como se les conoce en
Venezuela a los revendedores de productos básicos al detal, para pasar a ser
ellos mismos los revendedores de la comida. “Si está involucrada en corrupción y
asesinato no puede ser alcaldesa”. Por ello Rodríguez hizo una denuncia formal
el 25 de abril de 2016 ante la Fiscalía del Ministerio Público –acerca de los
llamados a saqueos que hizo Hinnaoui– bajo la argumentación de que es un delito
de incitación a delinquir.
¿De dónde sale Zobeida?
El
Hinnaoui no tiene raíces calaboceñas y es la primera alcaldesa de ese municipio.
Obtuvo 21.873 votos (51,41 por ciento) como representante del PSUV y del Gran
Polo Patriótico en las elecciones de finales de 2013.
Su
gran valedor ha sido el secretario general de Podemos, Didalco Bolívar, según
afirma un político calaboceño de vieja data. Según esa versión Bolívar, quien
volvió al chavismo en 2011 luego de estar exiliado en Perú, solicitó al Gran
Polo Patriótico la alcaldía de San Juan de los Morros, pero le dieron la de
Calabozo. En ese momento Podemos estableció una alianza con Tarek El Aisammi
para desplazar al candidato ganador del PSUV, Wasin Taifur. Así, Zobeida El
Hinnaoui resultó apoyada por la maquinaria.
El
gobernador Ramón Rodríguez Chacín fue en su momento un importante animador de la
candidatura política de Zobeida El Hinnaoui. Se enfrentó a todos. La dirección
del Psuv en San Juan de los Morros, la capital de Guárico, protestó su
nombramiento desde el principio y solo aceptaron su candidatura como la decisión
natural de las autoridades nacionales.
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Otra
fuente de apoyo importantisima para Zobeida es el dirigente de Podemos Gerson
Pérez, quien, se manifestó a favor de ella durante la campaña el 1 de septiembre
en el diario El Nacional. “¡Es una camarada con aceptación popular
en el eje llanero y en tierras guariqueñas, donde tiene un trabajo de años! Es
una abogada, administradora, de padres sirios, capacitada para gerenciar el
municipio”.
El
26 de febrero el
periodista guariqueño Pedro Zapata le hizo una entrevista en
la que alababa a El Hinnaoui y la presentaba como candidata ideal para Guárico.
No escatimó en buenas palabras: “Egresada de la Universidad Bicentenaria de
Aragua (UBA), de familia siria, con formación militar, sus padres son Trudy
Khatar El Hinnaoui y Wasila Salah, (comerciantes) solo tiene un hermano, también
revolucionario como ella, bueno muy bolivariano y apureño, Omar El Hinnaoui.
Todo un ejemplo del ser que quiere superarse y avanzar para un mejor mañana y
sin freno”.
Durante
algun tiempo vivió bajo el cobijo del alcalde saliente, Porfirio Torrealba, en
el Best Western Plaza Real, que es de lejos el alojamiento más lujoso de
Calabozo, según recogió el semanario Tal Cual en 2013.
Posteriormente compraría una casa ubicada en la Avenida 23 de enero, una de las
mejores zonas del pueblo, donde es vecina de la madre y los hermanos del
presidente del Centro Nacional de Comercio Exterior (Cencoex), Rocco Albisinni.
Esa vivienda ha sido convertida en una fortaleza de color blanco, con enormes
paredones que ocultan la fachada de la
vivienda.
La estatua de Chávez
En
octubre de 2014 Zobeida El Hinnaoui decidió colocar una estatua de Hugo Chávez
en la plaza que homenajea al General Rafael Urdaneta, uno de los espacios con
mayor carga histórica de la ciudad, considerada patrimonio cultural de la
nación. Esa decisión supuso la profundización de los malestares de parte de la
población con lo que consideraban como decisiones unilaterales de la alcaldesa.
La distinción, establecida en una resolución del Instituto de Patrimonio
Cultural del 20 de febrero de 2005, que impide modificaciones mayores, fue
ignorada por Zobeida El Hinnaoui para hacerle un homenaje a su
inspirador.
Eduardo
López, abogado de la ciudad, protestó la decisión en una demanda: “La alcaldesa
ha seleccionado la fecha del natalicio de Urdaneta para deshonrar su memoria
colocándole a su lado otra estatua”. Y finalizó su comentario con una pregunta
irónica: “A partir del 24 de octubre de 2014 la plaza empieza a tener un título
inédito en la historia de los ayuntamientos. ¿Plaza Invadida, Sitiada,
Conquistada, Asaltada?, preguntamos los calaboceños”.
En
los corros de señores que se sientan en las plazas, en buses, bares y
peluquerías, en los grupos de vecinas con rollos en la cabeza comentando en las
aceras, en la radio y en las redes, corren toda clase de hipótesis acerca de
cada uno de los escándalos de la alcaldesa. El deseo allí es casi unánime: que
la alcaldesa renuncie a su cargo por lo sucedido con su hermano y la presunta
mafia familiar que allí campea. Pero la renuncia nunca ha sido una opción para
funcionarios electos.